El Ministerio de Salud (MINSA), a través de los diferentes protocolos y guías para el retorno a la “nueva normalidad” busca que la apertura de las clínicas de atención bucal tanto en el sector público como privado sea dividida en dos fases.
La contaminación a través de la saliva luego de realizar una intervención bucal puede ser una potencial forma de infestación por COVID-19, ya que la persona es salpicada con partículas en el rostro, cabello y parte de su cuerpo, aseguró la jefa nacional de Salud Bucal del Ministerio de Salud Esmeralda Martínez.
La fase número uno que está operando en la actualidad consiste en intervenciones menores tales como: exámenes para manipuladores de alimentos, consultas de programas maternales, pediatrías y extracciones sencillas que no incluyan la utilización de piezas que produzcan aerosoles.
La fase número dos implica que los odontólogos puedan hacer, limpiezas, calzas, y extracciones complejas, para lograrlo la clínica odontológica tendrá que utilizar medidas de bioseguridad extremas, como que el paciente utilice gorro, zapatos y bata, todas estas medidas son de bioseguridad para evitar la contaminación cruzada.
Esta fase iniciará en la provincia de Los Santos y las instalaciones preparadas con las medidas de bioseguridad exigidas para estos procedimientos bucales.
Las guías para la apertura de las clínicas odontológicas se encuentran en la página web del MINSA o accediendo al link http://www.minsa.gob.pa/informacion-salud/planes-protocolos-y-guias-covi...